TE LOS PRESENTAMOS Y ASI LOS CONOCES
Cuando se habla de los vendedores del Mercadillo de Sagarra se trata de los que tienen un puesto desmontable en las calles del mercadillo de los Lunes y estamos en que se celebre los festivos
Una parte de ellos se dedica a la venta no sedentaria en varios mercados durante la semana. Otros sólo montan su puesto en el Mercadillo de Sagarra y no son verdaderamente Venta no Sedentaria aunque pueden tener un negocio o trabajo propio en otra parte. Todos los vendedores del Mercadillo de Sagarra tienen actualmente un puesto asignado por el Ayuntamiento marcado en el suelo de la calle y pagan una contribución municipal en función del espacio ocupado y de su ubicación. Están sometidos a la Ordenanza (que muy pronto será tratada y mejorada, en la futura mesa de trabajo) que exige muchos documentos para la renovación de su permiso que no dejó nunca de ser provisional, aunque en la actualizada cuenta con más estabilidad.
En sus paradas, venden todo tipo de mercancías, a excepción de animales: perfumes, bisutería, acuarelas y óleos, cerámica, plantas, lámparas, antigüedades, ropa nueva y usada, mantas, camisetas, abanicos, material de electricidad, bombillas, cosmética, peines y cepillos, objetos de decoración, lámparas, mantelería, zapatos, lencería, bolsos de artesanía, mochilas, bordados, CDs., accesorios de informática y ofimática, etc.
Los vendedores suelen ser muy simpáticos. Entre ellos, hay muchos colomenses, forasteros llegados a la Ciudad, extranjeros residentes en Barcelona y sus alrededores. Son de todas las etnias y sus idiomas son de todas partes del mundo. Algunos han vivido en varios países antes de asentarse en Barcelona. Se llevan bien entre sí y se ayudan unos a otros. El Mercadillo de Sagarra es una comunidad sin guetos ni aislamientos. En la mañana de los Lunes y estamos en que se celebre los festivos, conviven vendedores de origen español (payos o gitanos), magrebíes, indios, paquistaníes, argentinos, peruanos, portugueses, franceses, centro-africanos, etc. Sus costumbres religiosas o culturales son diversas: se respeta a los musulmanes con su Ramadán y sus mujeres con velo, a los evangelistas, a los gitanos con sus costumbres y su manera de vestir , al hippie de los años 70, al joven con su piercing, sus peinados y su ropa llamativa y original. Todos toleran a todos. El Mercadillo de Sagarra es un ejemplo para las sociedades y signo de convivencia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario